El traje masculino de la Fiesta de la Vendimia
Cuando un muchacho, ya sea mayor o pequeño decide salir en la Fiesta de la Vendimia, sabe que va a contribuir con su pueblo, que va a tener el orgullo de vestir el traje típico de su Fiesta y que va a tener un recuerdo para toda la vida.
Para todas aquellas familias que han decidido que sus hijos deben demostrar el orgullo de ser requenenses y se han apuntado a participar en las fiestas, ahí van unos pequeños consejos de cómo han de vestirse.
El traje de hombre labrador o vendimiador, siempre ha sido muy austero, aunque también conlleva un cierto toque de coquetería y de personalidad.
El traje masculino se compone de:
Camisa:
de algodón, lienzo o lino blanco o crudo, abierta solamente por la pechera, con lorzas y manga larga muy ancha.
Medias:
de hilo blanco o crudo, hasta las rodillas. Sujetas con goma elástica o vetas atadas de cinta de pasamanería, llamadas “cenojiles”
Pantalones:
calzón corto, bajo la rodilla, abierto por los lados, con abotonadura en los camales o con trenzado de cinta negra u otro color rematado con lazo o con borlas o madroñeras.
Faja:
bien apretada, ancha, rodeando toda la cintura, para sujetar los pantalones o, más bien, los riñones y sobre todo sin dejar colgando ningún trozo como si fuera un fajín de militar o clérigo.
Chaleco:
sobe la camisa, liso o estampado preferentemente solo por la parte delantera y liso por la parte de atrás (pensando en que encima iba una chaqueta o “chupa”), con solapa triangular y cuello alto o ya más moderno con solapa sobre la pechera. Nunca debe ser grande, ni sobrepasar la cintura, hay que dejar ver, un poco, la faja.
Calzado:
Alpargatas trenzadas sobre el tobillo. Y si va de mucha fiesta (presentación, actos religiosos) y para ir en consonancia con el traje de su pareja femenina, zapatos negros con hebilla plateada.
Chaqueta:
no es un atropello a la tradición, pero el traje típico requenense puede terminar con el uso de la chaqueta o “chupa” en momentos de ambiente frío o simplemente en actos protocolarios en los que el hombre no debería asistir en mangas de camisa. La “chupa” es una chaquetilla corta, elaborada con el mismo tejido que el pantalón y del mismo color haciendo juego.
Este sería, a grandes rasgos, el traje masculino.
Texto firmado por D. Ernesto Pérez Martínez